El día que Luis (el colchonero de Valladolid) nos acompañó a la nave donde trabajaba abriendo los colchones para sacarles la lana, me invadió una sensación de tristeza al ver el estado en que estaban aquellas telas de colchón. Pero al mismo tiempo los ojos se nos hacían chiribitas, pensando en recuperarlas e imaginando los fantásticos productos que podrían salir de ahí.
Esta entrada, escrita por Mar Santiago, resume el proceso vivido por ellos, maestra y alumnos, durante la creación de este mapa y cómo esto ha sido una excusa para hablar, razonar, preguntar, inferir, imaginar, etc.
En el curso escolar 2000/01 conocí las aportaciones de la Filosofía para niños (FpN) al currículo escolar y su finalidad de dotar a estas criaturas de capacidad para mejorar su pensamiento de forma crítica, creativa y ética; así que desde entonces hago sesiones semanales de Diálogo Filosófico.Sigue leyendo «Camino al Jardín de Juanita. Filosofía con niñas y niños.»→
Desde hace unos años voy imprimiendo la forma de las plantas y sus colores con martilleo o HapaZome, un sistema de golpeado al que India Flint le dio el nombre. Sobre todo uso este sistema con los niños a los que les encanta golpear a discreción y observan curiosos las formas y los colores de las hojas o pétalos a través de la tela. Lo he usado, entre otras experiencias en los mapas Camiños no Milladoiroy A cidade Entretodos
Agua de hierro antes y después, tras la noche con las hojas.
A continuación, esta mi primera experiencia de teñido con vegetales en un rollo de telas. Tengo un frasco con varios trozos de hierro y agua para producir «agua de hierro». La eché en una fuente y rellené el bote con más agua para futuras experiencias. En esta ocasión añadí un poco de vinagre. Pusé ahí varias hojas de Eucalipto, de Arce japonés, de Acacia Longifolia (una especia de mimosa con las hojas más grandes y duras) y de bambú. También coloqué en remojo unos trozos de algodón de diferentes texturas. Y dejé reposar esto una noche.
Por la mañana el agua se había puesto negra y las hojas de eucalipto pintaban de negro sobre las telas.
Extendí las telas, colocando sobre ellas las hojas, enrollando sobre un palo y atando, luego hice esos atadillos o bundles. Los puse en la olla para recibir el vapor de agua durante una o dos horas.
Abrir los paquetes y observar el resultado es maravilloso. Realmente mágico. Quedaron muchas dudas a resolver en futuras experiencias:
-Las hojas de Eucalipto y Arce son las que dejaron una huella más nítida.
-La impresión del haz y del envés es diferente sobre todo en la hoja de Arce.
-Los pétalos de Hortensia apenas dejaron huella, pero sí cambiaron el color del tinte que pasó del negruzco a un verdoso.
-El atado Ha formado una especie de shibori inesperado.
-El algodón de tela de forro ha dado muy buena terminación.
El proceso de teñido con plantas es algo mágico que no acaba en el propio proceso de teñido, sino que continúa como un color con vida, cuando le da la luz o recibe humedad. Para mí este cambio no es un fracaso, es una transformación y así lo intento transmitir a todos con quienes juego a tomar prestados los colores de las plantas. India Flint, artista australiana de los tintes naturales a la que admiro profundamente, llamó HapaZome al modo en que las plantas prestan sus colores a las telas al golpear en ellas. Sigue leyendo «Camiños no milladoiro-4. Tiñendo con flores»→
Resulta tan fácil crear nuevas páginas y/o blogs que con frecuencia este universo bit se llena de informaciones_ensayos, que finalmente no sirven a nadie, ni a quien las creo. También, a veces, están tan espalladas que no se localizan facilmente.
Aquí reuno los blogs creados con diferentes intereses y que me interesa mantener visibles.
Mirando y mirando es un blog donde vamos a explorar y explotar lo que «nos dicen» las imágenes para poder hablar y escribir de/sobre/a propósito/a través/por medio de ellas. …. o cualquier otra cosa. Las imágenes serán la excusa para escribir y hablar, para hablar y escribir. Los textos pertenecen a los chicos y chicas que asisten a los cursos de español de la ALCE de Ginebra del 2009 al 2012.
En la Escuela de Arquitectura de Coruña y con motivo de la exposición Cartografías textiles, donde están colgados algunos de mis mapas, hemos tenido un taller para el inicio de un mapa a base de hilos y telas. Sigue leyendo «Taller de Cartografías textiles. ETSAC»→
Os invito a ver mis mapas
-para observar la Gran Vía de Madrid transformada en una rama del Árbolgrassy
-para conocer de dónde salieron los tejidos blancos del Báltico2
-para ver como teñí las telas en el Con-textilizando a Foz
-para reconocer en el Camarote de Paula una zona de Haciadama
-para aprender un poco más de la historia de San Francisco a través del Diseño del Pueblo de la Yerba Buena.
Como decía en la anterior entrada, durante mi estancia en San Francisco en enero 2017, la visión del mapas de la ciudad me lleva a investigar los orígenes y la evolución esta zona. Lo que voy descubriendo es una historia viva y un crecimiento trepidante de esta ciudad, como dice David Rumsey en la introducción del libro San Francisco in Maps & Views– December -2006 de Sally B. Woodbridge
«Hubo una época en la que cuando se publicaba un plano “official” de la ciudad hecho con gran esfuerzo de cartógrafos y dibujantes, ya se había quedado obsoleto, y no solo por el crecimiento sino por la redistribución de tierras».
Antes de la llegada de los primeros europeos, se cree que había en California cientos de pequeños grupos de indios hablando muchos idiomas diferentes. Parece que vivían en armonía con la naturaleza. He encontrado pocos indicios de su existencia en mi búsqueda de información. E ntre otros, algunos nombres topográficos como Sonoma o Islais Creek. Sonoma significa Valle de la lunapara los indios Chocuyen que allí habitaban. Islais Creek es el plural españolizado de la palabra india Islay que en idioma de la tribu de los Salinan, significa cerezo silvestre. Aparece registrado en el mapa Diseño del Rincón de las Salinas y Potrero Nuevo
Los indios fueron, sin duda, una mano de obra barata a la llegada de los primeros conquistadores y misioneros, ellos cosntruyeron las misiones y demás edificios de la época y de ellos queda el preciosísimo techo de la capilla de la Mission Dolores, edificio de adobe (que resistió el temblor e incendio de 1906)
Los descubridores, conquistadores, marinos, cartógrafos, …. (¿qué nombre darles?) bajo el auspicio y órdenes de la Corona de España, Virreinato de Nueva España, navegan por la costa del Pacífico hacia el norte. Van nombrando lugares, describiéndolos y marcando latitudes (también equivocándose en sus marcas), así San Diego, Monterrey, Golfo de Farallones y más al norte Cabo Mendocino, etc.
Estas son algunas fechas que me parecen claves:
En 1542 la Expedición de Cabrillo llegó hasta estas costas.
En 1579 durante su viaje de circumnavigation, Francis Drake, llega las costas de California buscando un buen abrigo para su barco.
En 1602, el cartógrafo Vizcaino también las recorre y hace anotaciones, levanta mapas nombra lugares como Punta Lobos, Bahía de Monterrey, Valle del Carmel, San Diego, etc. (cuya latitud anotada llevan a error a los navegantes posteriores)
Hacia mediados del SXVIII, es decir más de 200 años después de las primeras expediciones, el gobierno de España insta a navegar, descubrir y colonizar tierras de la Alta California, (quizás por temor a que otros las colonizaran, los ingleses, los rusos, otros colonos desde Canadá, …) Así que conocedores del valor estratégico de la zona, decidieron continuar los viajes, exploraciones y asentamientos en estas tierras.
Imagino la formas de anotar, describir los espacios geográficos y las herramientas para marcar latitudes, distancias, alturas en aquella época. Para una usuaria del GPS o del Google maps, realmente resulta milagroso que se pudieran llegar al punto deseado . No solo se apoyaban en el «software» de la época sino en descripciones de lo que veían. Descripciones maravillosas que nos ayudan a comprender como era la zona. Ciertamente con cierta frecuencia había notaciones y descripciones que confundían a los expedicionarios. Una de esas confusiones tuvo como consecuencia el descubrimiento de la bahía de San Francisco:
En 1769 Portolá, nombrado Gobernador de la Alta California, lleva a cabo una expedición en compañía, entre otros de Fray Junípero Serra para llegar a Monterrey. Al llegar a San Diego, con muchos de sus hombres enfermos de escorbuto, Portolá sigue la expedición por tierra en paralelo a la costa, pero pasan cerca de Monterrey sin darse cuenta, subiendo hacia el norte, llegan a un lugar que no se parecía en nada al descrito por Vizcaino. Llegan a un lugar con lagunas y grandes bancos y montañas de arena, suben a lo alto de una colina (Sweeney Ridge. ) y desde allí observan la bahía . Como en esta foto del 2014 de Chris Romero donde se ve (aunque con cierta niebla) el lago Andreas en primer lugar, a la izda. South San Francisco después la bahía y al fondo Oakland
Siguendo con el deseo y orden de los gobernantes de colonizar aquellas tierras, continúan las expediciones. En una de ellas Palou, fue el prmer misionero que llegó a la bahía con el capitán Fernando Rivera y Moncada.
En 1774 se inicia una expedición por tierra dirigida por De Anza con más de 200 colonos y gran cantidad de caballos ovejas, vacas. Llegan a San Francisco y establecen un presidio y una misión. Una segunda expedición similar en 1776.
Ese mismo año, 1776, 13 colonias del este firman La Declaración de Independencia de los Estados Unidos de América,
Poco a poco la buena ubicación de bahía de SF, es refugio de barcos, descanso tras las travesías por el venteado Pacífico y buen lugar para intercambiar pieles, sebo y llenar sus barriles de agua dulce. Barcos de todas las banderas que vienen de las Indias o del Norte, así llegan gentes rusas y anglosajones, emigrantes Irlandeses en Canadá que oyendo hablar de las bondades de California bajan hacia el sur.
En 1821 México se independiza de España.
En 1835 W.A. Richardson, capitán de un barco inglés, es uno de los primeros que se queda a vivir en esta zona, se casa con la hija del comandante del Presidio se queda en SF y hace la primera casa que es una carpa de lona en la misma playa. Apenas unos palos y una lona por techo.
1836 Jacob P. Leese (nacido en Ohio, USA) construye la primera casa de adobe y se convierte en el primer empresario de S. F. Cerca de la actual Plaza Porsmouth. Donde poco después se construye la primera escuela. Alrededor de esta plaza (que actualmente es Chinatown) nace San Francisco. View 1769
En 1839 Francisco Guerrero el tercer alcalde de SF. encarga a Jean Vioget que planifique aquellas construcciones que empiezan a crecer y cuyos habitantes necesitan y desean establecer los límites de las propiedades. Es el primer plano «oficial» de SF.
Y así hace la primera cuadrícula alrededor de las calles Pacífico, Montgomery, Sacramento y Dupont (hoy llamada Grant) Una cuadrícula que no parecía que hubiera que tener en cuenta las colinas Nob hill, Russian o Telegraph Hill. –
En 1847 Jasper O´Farrell es llamado a construir un nuevo plan urbano bajo el auspicio del primer alcalde americano. Inmediatamente se dio cuenta que el paln de Vioget (cuadrícula sobre las colinas) era inviable como ciudad y solo servía para establecer límites, pero dificultaba la construcción de calles y casas enormemente. Sus primeras ideas fueron hacer las calles con terrazas y contorneando las colinas, pero nadie en su sano juicio se opondría a los propietarios que lo único que veían era oro, presente y futuro, así que lo que hizo fue:
-corregir en unos dos grados la cudrícula de Vioget
-marcar la calle/avenida principal Market Street
-Trazar las calles al sur de esta avenida y perpendiculares a ella
-Trazar otro requiebro a la altura de la Mission Dolores para acomodarse al valle.
Ver más información en PLAN DE SAN FRANCISCO M. G. Upton
En 1848, tras varios años de guerra, se firma el tratado Guadalupe-Hidalgo, que pone fin a las disputas de los EEUU sobre las tierras anteriormente mexicanas y se establece la actual frontera. Mapa del tratado La fiebre del oro llega ucuando nos días después de firmar el tratado de Guadalupe-Hidalgo se descubre oro en Sutters Mill, cerca de la actual Sacramento y comienza una afluencia de gentes procedentes de todos sitios, imposible de parar hasta que el oro se agotó. San Francisco se convierte, entonces, en el lugar donde gastar el dinero. Florecen todos los negocios intermediarios, los bancos, las tiendas de proveedores, lugares de juego, apuestas, cabarets, etc.
Las gentes llegaban por tierra y por mar. Por tierra, los que procedían del Este tenían un difícil camino, primero atravesando las Montañas Rocosas y finalmente los desiertos y la Sierra Nevada.
Por mar, al amparo de aquella maravillosa bahía, vinieron muchos barcos que eran totalmente abandonados al llegar. Absolutamente toda la tripulación marchaba a la búsqueda del oro. Se dice que llegó a haber más de mil barcos, tantos que los mástiles se enredaban a veces y que dificultaban enormemente el paso de uno a otro o el transporte de mercancías de barcos anclados en el medio de la bahía a tierra firma. Muchos de estos barcos descansan ahora bajo los edificios del distrito financiero.
Los gobernantes de la ciudad , a la vista del crecimiento poco controlado y de la necesidad de terreno hacia el mar, vendieron “parcelas de agua” que fueron compradas con la obligación de hacerlas habitables. Una forma de hacerlo era hundiendo los barcos y usando estos despojos como relleno de la bahía. En este mapa podemos ver los barcos que están bajo los grandes rascacielos del distrito financiero y de los cuales se han encontrado restos en diferentes prospecciones arqueológicas. Ver más información de esta zona recuperada en el post de National Geographic.
El tratado de Guadalupe-Hidalgo (1848) no se cumple en su totalidad y se modifica en dos artículos que me parecen trascendentales para el futuro de esta ciudad (y del resto de California). Son artículos que hablan de los derechos civiles de los mexicanos que allí habitan y a los que se debe equiparar con el resto de habitantes de EEUU y sobre el título de propiedad de los terrenos en los que viven los mexicanos.
La supresión de estos artículos, o el no cumplimiento, la llegada masiva de gentes del este de EEUU y lo poco claro (en términos legales) del establecimiento de límites en las propiedades, hace necesario la creación de un tribunal que dictamine el o los dueños de cada espacio de terreno (Corte deReclamacionesdeTierras Privadas). Los reclamantes se sirven entre otras cosas de mapas realizados, en general, con poca ciencia cartográfica y con un mucho de ingenuidad. Mapas, planos que se denominan: Diseño del …. ( Rancho de San Miguel , por ejemplo)
Entre que los propietarios de los antiguos ranchos estaban en México y dejaban despreocupadamente el pastoreo y cuidado de los terrenos en manos de criados y sirvientes y que la gente llegaba a raudales y con dinero y se establecía casi en cualquier sitio, la mayoría de las veces los tribunales emitieron decretos a favor de los ciudadanos de EEUU. Así la inmensa mayoría de los ranchos fueron divididos o dejaron de estar en manos hispanomexicanas.
No obstante la impronta de los nombres españoles de los lugares físicos o calles de la ciudad es enorme y resulta tremendamente curiosa.
California se sumó a la Unión como un estado en 1850.
Y la ciudad crece y se va extendiendo hacia el sur y al otro lado de la bahía: Contra Costa, Oackland, etc. Más tarde es la fiebre de las punto.com, el Sillycon Valley y la población sigue aumentando densificando toda la península hasta llegar a los más de 7 millones y medio de habitantes en toda la zona Bay Area.